La comunicación al servicio de la globalización (4)

Último capítulo de la serie, en el que se esbozan propuestas de futuro para desarrollar desde la ciudadanía y los movimientos sociales con el objetivo de no permanecer impasibles ante los abusos impuestos por el modelo globalizatorio. 

  

Optimismo 

A lo largo de los capítulos anteriores, se ha presentado un panorama desolador y, casi, irreversible. Sin embargo, es posible vislumbrar una esperanza remota en la situación actual. La antropóloga Yayo Herrero habla de los equilibrios dinámicos para describir el funcionamiento de los sistemas vivos y define el momento actual como un punto de bifurcación:

El sistema se aleja del equilibrio y se producen dinámicas para regularse y volver a la situación inicial. Lo que sucede a partir de un punto de bifurcación es imprevisible. Actualmente, estamos en este umbral.

Antes de concluir, es necesario recordar una reflexión de Jöel de Rosnay acerca de la posible resistencia a la invasión de la globalización. Rosnay señala la importancia de no renunciar a las formas tradicionales de adquirir conocimientos, pero se debe ir más allá. No se puede renunciar a las formas tradicionales de entenderse, de cooperar, de resistir, de luchar, de soñar.

Es en los puntos de bifurcación donde se define el camino a seguir. Por ello, los esfuerzos deben ser mayores para lograr la dirección adecuada. Se han vislumbrado las consecuencias de la globalización y los intereses que la mueven. Ahora el protagonismo debe volver a la gente para  inventar nuevos caminos.